Quizá has escuchado su nombre o quizá no pero lo que es casi seguro es que habrás escuchado hablar o habrás visto alguna de sus cintas.
Darren Aronofsky es un director de cine estadounidense que nació el 12 de Febrero de 1969 en Brooklyn (Nueva York). Aronofsky mostró interés por lo audiovisual desde muy joven y realizó varios cortos: Supermarket Sweep (1991), Fortune Cookie (1991) y Protozoa (1993), pero no fue hasta el año 1998 cuando el director se lanzó de lleno a los largometrajes.
Con apenas 29 años, Darren dirigió Pi: Fe en el caos, su primer largometraje. La cinta, en blanco y negro, tuvo un presupuesto de solo 60.000 dolares y consiguió recaudar más de 3 millones. El guión salió de la propia mano de Darren Aronofsky y Sean Gullette, que seria quien posteriormente protagonizaría la película.
Pi contaba la historia de la obsesión del experto en las matemáticas Max Cohen por el número pi. Max está convencido de que todo lo que ocurre puede explicarse a través de una formula, la lógica y a través de los números. Sumergido en esta obsesión, recibe en su puerta a una empresa importante de Wall Street que quiere contratarle para descodificar el sistema financiero y salir del caos económico en el que estaban inmersos desde hacia bastante tiempo, pero esta empresa no es la única que requiere sus servicios ya que una secta judía necesita descifrar unos textos sagrados de miles de años.
Dos años después de Pi, Aronofsky lanzó Requiem por un sueño (se estrenó en 2001), en ésta se plasmaba la historia de Harry Goldfarb, un adicto a la heroína. Esta adicción es el centro de su vida y acaba por aislarle del mundo exterior. Su novia Marion (Jennifer Connelly) y su mejor amigo Tyrone (Marlon Wayans) también son drogadictos y los 3 crean un paraíso en el que nada es lo que parece. La desesperación y la angustia serán la parte central de esta historia. Por otra parte, su madre, desarrolla una adicción con la televisión que acabará por provocarle problemas con la alimentación.
Basada en el libro homónimo de Hubert «Cubby» Selby Jr, Requiem por un sueño fue uno de los proyectos más dificiles para Darren. El título del libro no pasó desapercibido para el director ya que quiso exponer esta película como si fuera una obra de orquesta. Para esta película, Jared Leto entabló amistad con algunos drogadictos de Brooklyn, mientras que Jennifer Connelly (la cual interpreta a una diseñadora de moda) empezó a hacer ropa para meterse en el personaje y acabó haciendo casi todo su vestuario. Además de dirigir la cinta, Darren escribió el guión junto al escritor de la novela.
Tras 6 años de parón, Darren dirigió La Fuente de la vida (estrenada en 2007), un drama que mezcla la ciencia ficción, con la trama romántica y la fantasía mientras nos cuenta la historia de Tommy, un hombre que se encuentra buscando a la mujer de la que está enamorado para salvarla, Isabel es esta mujer y es una escritora que lleva meses trabajando en un relato fantástico. Inspirado en la historia que ella ha escrito, se sumerge en este mundo ficticio para crear un medicamento que curarle a Isabel el cancer terminal que padece.
Darren también fue ambicioso con este proyecto, en el cual no solo quería mostrar la historia, si no enseñar la muerte, la busqueda de la inmortalidad y la enfermedad de otra forma. Quizá pecó de exceso de efectos especiales, aunque esto ya depende de dónde esté el limite de exceso de cada uno. Aún así, los medios y sobre todo el público general ofrecieron críticas bastante decentes. Actualmente, en imdb tiene una puntuación de 7,3/10 y en Rotten Tomatoes tiene un 5.9/10 por parte de los críticos mientras que los usuarios le dan un 3,4/5.
El siguiente proyecto fue un largometraje aparentemente más modesto. A pesar de que lo que más le gusta y mejor le sale a Aronofsky es el thriller psicológico, en esta cinta se centra en el puro drama, en las segundas oportunidades y el afán de mejorar para sobrevivir.
‘El luchador’ trata sobre la vida de un ex luchador de wrestling (Robinson) que tuvo su auge en la década de los 80. Con el paso de los años y el abandono de la lucha, este ex luchador vive como puede mientras trabaja en algunos gimnasios de institutos o en rings de baja categoría. En uno de los combates para viejos admiradores, sufre un infarto y le obligan a dejar la lucha. Tras esto, Robinson, tiene que reconstruir su vida.
2 años después, tras su gran fama años atrás por Requiem por un sueño, 2010 y 2011 se pueden considerar dos de los mejores años (profesionalmente hablando) para el director. Cisne Negro fue la película que consiguió que volvieramos a escuchar el nombre de Darren Aronofsky por todo lo alto. A pesar de que esta cinta le dio varios dolores de cabeza por el «bajo» presupuesto y por gastar este antes de tiempo, la película le trajo muchas alegrías.
Natalie Portman es la protagonista de este thriller psicológico. Nina, su personaje, es una bailarina de Nueva York que siente pasión por el ballet. Cuando el director artístico de la academia sustituye a la bailarina protagonista del montaje de «El Lago de los Cisnes», Nina ve su momento para triunfar. Pero el director artístico se fija en otra chica para el papel principal al ver que ella no tiene la suficiente «sensualidad», lo que hará que la rivalidad entre estas más las presiones de su madre le hagan obsesionarse y sacar su lado destructivo.
Cisne Negro fue un proyecto muy dificil también para Natalie Portman por sus duros entrenamientos antes de las escenas ya que acababa destrozada. Pero la actriz confirmó que sin duda todo el esfuerzo había valido la pena. Su gran papel en esta historia, le supuso la nominación al Oscar a Mejor Actriz Principal y su prosterior victoria frente a Annette Bening (The Kids Are All Right), Nicole Kidman (Rabbit Hole), Jennifer Lawrence (Winter’s Bone) y Michelle Williams (Blue Valentine). Además de esta nominación a los Oscar, obtuvo 4 más (mejor película, mejor montaje, mejor fotografía y mejor director).
El siguiente proyecto, quizá es el ‘tropezón’ más caro del director neoyorquino. Noah (Noé en castellano) tuvo un presupuesto de casi 130 millones de dólares frente a una recaudación de más de 300 millones de dolares.
La cinta cuenta la historia bíblica de Noé de una forma más fantástica (más aún si es posible), en el que se centran en la destrucción medioambiental y los sacrificios, todo mezclado con la creación de la famosa arca que tendrá que llenar con una pareja de cada especie para repoblar la tierra después del diluvio universal. Durante la creación de este arca, ocurren varios acontecimientos que entorpecerán el curso de la historia.
Quizá el exceso de fantasía y la animadversion de cierta parte de los espectadores a algunas historias bíblicas fue lo que llevó a Noé a tener unas críticas no tan buenas como se esperaban. Pero dentro de lo que cabe, fue un proyecto medianamente rentable y ese ‘tropezón’ se lo debemos a las malas críticas y a los errores de guión.
El siguiente largometraje de Darren nos lleva directamente hasta nuestros días. Mother!, su nuevo proyecto, será un thriller psicológico con toques de terror protagonizado por Jennifer Lawrence, Javier Bardem y Michelle Pfeiffer. Se estrenará el próximo octubre y la historia gira en torno a una pareja cuya relación se pone a prueba cuando reciben la visita inesperada de una serie de extraños invitados que hacen acto de presencia en su casa. Pero, por si aún no os lo habíamos contado ya, Darren Aronofsky siempre tiende a llevar en secreto los detalles de sus proyectos, por lo que hasta ahora no tenemos mucha información de esta película. Sin embargo, con la celebración del día de la madre en Estados Unidos, Aronofsky aprovechó para lanzar el primer poster de Mother.
La gran mayoría de estas películas son una muestra de que lo que más le gusta es el thriller psicológico y de que adora la idea de que casi todos sus personajes sean atípicos, algo problemáticos o perturbados. Si aún así no habéis visto ninguna película del director, os animamos a hacerlo, porque más que crear cine, crea arte.
About Irene Ruiz
Directora de Guarida del 7º Arte. El mundo cultural me apasiona, por lo que escribo sobre ello. Seriefila y cinefila a partes iguales.