ESTE ARTÍCULO PUEDE CONTENER PEQUEÑOS SPOILERS
La trilogía de El Corredor del Laberinto comenzó en 2014. La primera película nos contaba la historia de Thomas (Dylan O’Brien), el cual abre los ojos y se da cuenta que está en un ascensor. Lo extraño es que no recuerda nada, ni dónde está, ni quién es. Lo único que aún permanece intacto en su memoria es su nombre, y ya es mucho. Antes de que le dé tiempo a cuestionarse algo sobre sí mismo las puertas se abrirán y aparecerá ante un un extraño mundo. Todo lo que ve son chicos de su edad que comparten su mismo estado de amnesia.
Tras su entrada en este «nuevo mundo», se encuentra en una situación horrible: todos están atrapados y lo único que saben del exterior es que alguien le manda nuevos compañeros y víveres para sobrevivir cada mes. Imagino que si estáis aquí es porque habéis visto las dos primeras películas por lo que no contaré más y me centraré en la última película.
¿COMO EMPIEZA?
La Cura Mortal nos sitúa, de nuevo, fuera del laberinto. Thomas y sus compañeros tendrán que resolver todas las preguntas que les persiguen desde que un día aparecieran en el Claro del Laberinto. Para ello, tendrán que volver al punto de partida donde empezaron, pero el camino no será nada fácil.
Se podría decir que el comienzo de esta película la sitúa en el primer puesto de toda la trilogía en cuanto a su principio, ya que empieza con una acción trepidante que nos mete de lleno desde el minuto 1. Tras este comienzo, nos sitúan en lo más importante de la película: recuperar a sus amigos y encontrar la cura para ese virus que está desolando el mundo y que amenaza con acabar con todos menos con los inmunes.
Sin embargo, la presencia de Ava Paige (Patricia Clarkson), Janson (Aidan Gillen), CRUEL y «los raros» (así es como llaman a los infectados) hacen que los protagonistas estén alerta durante las casi dos horas y media que dura el broche final de esta saga y por lo tanto nos mantiene en alerta a nosotros.
LA EVOLUCIÓN DE LOS PERSONAJES
Los personajes consiguen evolucionar de una forma correcta a pesar de que no nos cuentan mucho más de ellos y nos quedamos, de nuevo, con la intriga de saber cómo fue su vida anterior al laberinto o al inicio de este virus que los tiene a todos en vilo. Independientemente de que no nos metamos de lleno en la vida pasada de éstos, la evolución de los personajes es más que satisfactoria y no consigue del todo aquello que todos tememos en una película: tener personajes planos.
La presencia de Brenda es mucho más importante en esta nueva entrega, ya que su relación de amistad se hace mucho más fuerte con todos los personajes, por lo que nos encontraremos ante una mujer increíblemente valiente, fuerte y recuperada de todo lo que ha pasado anteriormente. Tras lo ocurrido con Teresa, necesitabamos un personaje femenino fuerte e interesante y sin duda Brenda (Rosa Salazar) consigue cumplir nuestros requisitos.
Quitando a los personajes importantes, los demás personajes aparecen para conseguir que la trama siga un buen ritmo y no se nos atragante.
EL GUIÓN Y EL ASPECTO TÉCNICO
A pesar de que la primera película es la más innovadora de las tres y la que consiguió que su historia fuera algo novedoso, La Cura Mortal no se queda atrás y rellena todos esos huecos en el guión que habían tenido las dos películas anteriores.
En cuanto al aspecto técnico, podríamos decir que, de nuevo, ha mejorado y perfeccionado todos esos pequeños huecos que podríamos encontrar y sin duda estamos ante la mejor imagen, sonido y edición de las tres películas. Las escenas de acción son más y superiores.
¿TIENE UN MENSAJE POLÍTICO?
Siempre que estamos ante una película de estas características nos preguntamos lo mismo: ¿tiene un mensaje político o simplemente quiere que veamos una nueva película situada en un futuro distópico en el que todo se ha acabado o está a punto de hacerlo?
En esta trilogía de películas, al igual que en sus libros, no podremos encontrar un mensaje político tan fuerte y explícito como teníamos en Los Juegos del Hambre o Divergente, pero si nos muestra de alguna forma a un grupo minoritario y en pésimas condiciones que no están de acuerdo con el curso que está siguiendo el mundo y las grandes esferas que parecen dirigir éste y que pretenden hacer diferencias entre unos y otros para que no todos consigan sobrevivir. Esta es la clave para que inicien una especie de rebelión que puede acabar muy bien o muy mal.
Pero aunque muchos crean que si, personalmente no creo que contener un mensaje político de este estilo sea malo, al contrario.
EL FINAL
Como hemos dicho, el guión mejora todos los posibles huecos que nos dejaron las pasadas entrega y, entre tanta acción, consigue que estemos ante una historia interesante. A pesar de que el final es apoteósico, interesante y extraño si hablamos del aspecto técnico, aunque da la sensación de que deja todo un poco abierto.
Es imposible negar que es un gran cierre para una trilogía que, sin duda, ha enganchado a muchos.
NOTA: 8 sobre 10.
Corre o muere.
About Irene Ruiz
Directora de Guarida del 7º Arte. El mundo cultural me apasiona, por lo que escribo sobre ello. Seriefila y cinefila a partes iguales.